Chufa es la protagonista de esta historia, una jirafa alta y delgada, con un largo cuello muy bonito. Pero tenía unas rodillas torcidas y unas patas como palillos. Se pasaba el día de pie, masticando hojas y hojas una jirafa que tiene las rodillas torcidas y no se la da bien bailar.
Todos los años, en África, se celebra el Baile de la Selva… ¡y a los animales les encanta bailar y hacer piruetas!
Chufa quiere participar en ese famoso Baile, pero no se la da muy bien bailar, cuando la jirafa se presenta en la fiesta y sale a la pista todos los animales se ríen de ella, porque se tropieza y no sabe hacer pasos de baile.
Chufa se siente triste y desolada pero un saltamontes la anima y la explica que cada uno tiene que encontrar su estilo y confiar en ella misma. Tras la ayuda del saltamontes consigue confiar en sí misma y bailar a su manera dejando a todos los demás animales sorprendidos que la aplauden y animan.
Una historia escrita en rima (con una traducción preciosa de Marga G. Borràs) que nos habla de superación, donde la protagonista se enfrentará a sus miedos y limitaciones, hará crecer su autoestima y se creerá capaz de conseguir aquello que se propone.
Un cuento que nos demuestra que una baja autoestima nos convierte en más vulnerables y que, si que podemos superarnos y mejorar nuestras habilidades, dando paso a la aceptación y comprensión del valor de la diversidad entre las personas.
Escrito por la autora Giles Andreae, con maravillosas imágenes de la ilustradora Guy Parker-Rees y traducido al español por Margarita Gómez Borràs. Puedes encontrar el cuento de las jirafas no pueden bailar libro en formato libro de texto y pop up, que es una auténtica obra de arte.